En que consiste el Factoring

Factoring

La mayoría de las ventas a clientes comerciales llevan generalmente términos de pago 30 a 60 días. Esto significa que como proveedor, debe entregar sus productos o servicios ahora. Sin embargo, su cliente tiene entre 30 a 60 días para pagarle.



Esto crea un desafío significativo para los propietarios de pequeñas y medianas empresas. El problema es simple. Sus clientes quieren pagarle en 30 a 60 días, pero usted debe pagar el alquiler, la nómina y sus proveedores ahora. Como puede ver, la matemática no funciona. A menos que tenga una cuenta bancaria importante, esto conduce a una situación casi imposible.

Si está en esta situación, también es muy probable que el banco no sea capaz de ayudarle. Como bien saben, los bancos sólo prestan a las empresas que tienen tres años de operaciones rentables y colaterales significativos. Si no califica para financiamiento bancario, su mejor apuesta puede ser considerar el factoring.


Que es el Factoring

Factoring es una herramienta de financiación de negocios que ayuda a los propietarios de negocios que no pueden permitirse el lujo de esperar 30 a 60 días para recibir el pago de sus clientes comerciales. El Factoring le proporciona los fondos necesarios para cumplir con la nómina, el alquiler y pagar a sus proveedores a tiempo.

A diferencia de la financiación bancaria, el factoring es fácil de calificar. Los requisitos principales son que debe tener un negocio rentable con una lista solida de clientes comerciales. Para la empresa de factoring, su mejor garantía son las facturas de sus clientes fuertes.

Como funciona el factoring

El factoraje o factoring también es fácil de usar. Le permite recibir una parte sustancial de sus facturas dentro de un día de facturación. Reduce el tiempo de espera para recibir el pago de 60 días a 2 días. La transacción suele estructurarse como una venta a dos plazos de una factura. La primera cuota, llamada el anticipo, se le paga inmediatamente. El anticipo puede estar entre el 70% y el 90% del valor bruto de la factura. La parte restante (10% - 30%) se mantiene como una reserva para cubrir disputas y cobrar costes. La reserva se rebaja tan pronto como la factura se paga en su totalidad. La empresa de factoring cobrará una pequeña tarifa por este servicio.

La financiación por Factoring es una herramienta ideal para las empresas que están creciendo y que no puede permitirse el lujo de esperar a ser pagado por los clientes. Le ayuda a estabilizar su situación financiera y las posiciones para el crecimiento.

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